BAJO LA MÁSCARA
Por: Santy Castillo Esta semana continuaremos con uno de los seriales que comencé hace un par de meses donde hemos recorrido y hablado sobre las diferentes arenas de lucha libre que existen en la capital hidalguense. En la primera entrega hable sobre el Gimnasio del valle, con el respectivo afectó y cariño que le tengo, posteriormente les conté de la catedral de la lucha libre hidalguense y ahora toca el turno de una de las arenas más importantes de la entidad, siendo semillero de un sinfín de talento luchístico de diferentes épocas. |
Antes de que lo conociéramos como el Deportivo 11 de Julio, en la colonia minera, existió el Centro Social y Deportivo Pachuca, ubicado en el que ahora conocemos como “Jardín del Arte” a unos cuantos metros de la Plaza Juárez.
Durante muchos años en el llamado Centro Social y Deportivo Pachuca se practicó el deporte de los costalazos, siendo el lugar predilecto para desestresarse y hacer deporte en la bella airosa, posteriormente el gobernador de aquel entonces Guillermo Rossell de la Lama, cerró este lugar para abrir las vialidades de Xicoténcatl, Matamoros y San Francisco, sin embargo a cambio construyó la colonia 11 de Julio, dedicando en la misma unas instalaciones similares a las del ya mencionado lugar.
Por este mismo motivo el nombre fue modificado a Centro Deportivo, Social y Cultural 11 de Julio el cual en el año de 1980 abrió sus puertas por primera vez, para cobijar y forjar a mucho de nuestro talento hidalguense.
Para recordar un par de las funciones de las más memorables, que albergó este mítico recinto, viajaremos por el tiempo hasta 1983, donde en vísperas de una semana deportiva (como suelen llamar a las festividades anuales de este lugar), se organizaron dos formidables funciones de lucha libre.
La primera el día martes llamada en aquel entonces de luchadores profesionales donde desfilaron por el encordado de la colonia minera figuras como: Lalo Montenegro, Troglodita Flores, El Tiburón, Blue Prince y Tino Arrieta. La segunda el día jueves con “luchadores Amateurs”, recordando nombres como El Barretero, Pantera Negra, Estrella Dorada, El marcado, El triguillo González, Príncipe Salvaje, Ranflex, Dinámico, Indio Judas y El Mapache.
Este gran coloso cobra vida gracias a cada uno de los talentos que ha forjado su trayectoria luchística. Leyendas importantes de nuestro pancracio estatal que fincaron las bases y escribieron su nombre con letras de oro, convirtiéndose en ejemplos a seguir ahora de los luchadores contemporáneos, así como de los jóvenes inquietos que acuden a ser instruidos para aprender las bases de este bello deporte.
En voz de Príncipe Salvaje Sr. el deportivo 11 de Julio fue el semillero de talento del estado de Hidalgo, debido a que el 99% de luchadores de aquel entonces pasaron primero por este tradicional lugar para posteriormente llegar a la catedral de la lucha libre hidalguense “La Arena Afición”, mencionando algunos nombres como: Los tiburones, Lalo Montenegro, Chamaco Robles, entre otros.
“La mayor parte de las estrellas de la Arena Afición siempre fueron criados y nacidos del Centro Social Deportivo y del Centro Cultural y Deportivo 11 de Julio”
En resumen este coloso siempre se conformó de gladiadores que además de ser deportistas de alto rendimiento, se dedicaban a la actividad minera, este recinto vio nacer, crecer y consagrarse a las grandes leyendas luchística de nuestra entidad.
No existe gladiador hidalguense consagrado que no haya pisado la lona del deportivo de la colonia minera, además ha sido por excelencia un recinto que forja grandes talentos, convirtiéndose en semillero importante de gladiadores, los cuales derrochan su talento en diferentes encordados, pero siempre bien formados por el recinto minero, es un lugar que conserva gran tradición debido a todas las enseñanzas heredadas por aquellos que fincaron las bases de la lucha libre en el estado de Hidalgo, pueden visitarlo en sus funciones dominicales a las 7:00pm, disfrutar de un buen espectáculo y gritar para desestresarse un buen rato.
Agradezco infinitamente a una gran dinastía del pancracio local: Príncipe Salvaje Sr. y Jr. quienes, se encargaron de contar a su servidor parte de la historia y datos recabados en este espacio de opinión personal, muchísimas gracias, ahora bien, nos leemos la próxima semana y ¡¡Arriba los rudos!!